Pero a pesar de sus distintos escritores, ocupaciones e idiomas, de estar en lugares y tiempos diferentes, todos los libros de la Biblia muestran una unidad y fue la inspiración divina dada por El Espíritu Santo a cada uno de sus autores (2 Sa 23:2). 1. Lee en contexto: https://theodoret480gox3.gynoblog.com/profile