Zidane se movía con la gracilidad de un bailarín. Cada gesto suyo era pura maestría y sofisticación técnica, él orquestaba el juego con fuego interior. Sus pases eran de una perfección pasmosa, como pinceladas https://lilliypyi144115.blogsuperapp.com/39118636/el-famoso-cabezazo-que-definió-la-carrera-de-zidane